Al hablar de la India siempre viene a mi memoria este maravilloso libro “El olor de la India” donde Pier Paolo Pasolini en unas pocas páginas y a la vuelta de su primer viaje, define tan bien el país y su gente, sus costumbres, esos tics que hacen de la India un lugar mágico y de sus ciudadanos unos seres únicos. Me impresionó su capacidad de síntesis y su percepción profunda y tan rápida de las cosas, muy aconsejable su lectura.

La India es un país lleno de color y contradicciones. Su particular sentido de la estética, el don para trabajar el color y el textil, las delicadas sedas y los livianos algodones tejidos en telares manuales, chocan en muchas ocasiones, con una pobreza extrema que desarma. Es una realidad y debemos mencionarlo en este nuestro primer post sobre el país.

En auka estamos desde nuestros comienzos muy ligados a la India que ya en un primer viaje me robó el corazón. Creo recordar que fue en el año 2.000 y desde ese momento he vuelto una, dos y hasta tres veces en un mismo año, ahora es una pasión que comparto con Sophia.

Hubo un momento donde nuestra producción estuvo centralizada allí, actualmente fabricamos: pashminas de cachemir, chales de lana, pañuelos y pareos de voile de algodón, bisutería y accesorios…en breve os los enseñaremos por aquí.

¿En líneas generales algo para no perderse? Sus mercados donde las telas, las flores , los verduras y las especias se mezclan entre ellas, son lugares de visita obligada cuando viajas a la India. Para conocer de forma muy rápida su saber hacer, sus pasiones, sus colores y ser consciente…del olor de la India.

Namaste.